La flota anglo-española entrando en Tolón, 1793.
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Los franceses sureños eran “realistas”; es decir, no aceptaban la Revolución porque aceptaban la monarquía absolutista de lo que hoy llamamos el “Antiguo Régimen”, cuyos monarcas creían que su reino era una gracia divina hereditaria y, por ello, absolutista.
Bonaparte durante el Sitio de
Toulon, en 1793
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En resumen, Napoleón terminó expulsando las armadas extranjeras y humillándolas. Recibió un disparo en un muslo, y siguió bombardeando los buques españoles y británicos hasta su retirada. Se creció el joven Napoleón con ese éxito, pero todos sus superiores se embriagaron de envidia. El muchachito capitán salvó a Francia de ser invadida. En el noreste, Francia se defendía contra Prusia y Austria.
El éxito del muchachito llenó de coraje al resto del ejército revolucionario. Napoleón saltó de Capitán del ejército, a General de Brigada, tenía 24 años de edad. ¡Pocos conocen la envidia que se viene después contra ese exitoso jovencito militar!
Homenaje a Napoleón Bonaparte por su triunfo en Toulon, 1793 |
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